El gorro rojo

Ayer parecíamos sardinas en el autobús en vez de personas, la verdad. Como se nota que estamos en fiestas, la gente utiliza este medio de transporte para ir al centro, realizar las vacías y superficiales compras navideñas reglamentarias y obligatorias y volver a casa todos cargados como mulas. O camellos. U ovejas.
Y había una chica sentada (afortunada ella) cerca del final con un gorrito de lana rojo, de estos para el invierno. Madre mía, rojo. No me gusta nada el rojo. Es un color cálido, y como cualquier otro color cálido, me pone tensa. Me desestabiliza. Lo mio son los colores frios, en especial, el blanco, el gris y el azul.
En éstas estaba yo, dándole vueltas a la gama cromática, cuando sonó su móvil. Yo me encontraba cerca, pero hubiera oído la conversación hasta en la calle, éramos demasiados en ese bus y a cada cual más maleducado, todos gritando para que su acompañante le oyera mejor (nadie tiene huevos de hacer las putas compras solo). Lo que no sé es como la chica oyó algo de su interlocutor.

Si! Estupendo! Pues nos vemos entonces ese día! Vale, a qué hora has dicho? Bien, no faltaré, sí, iré con mi novio, sí. Ah vale, una botella de vino. Además, te hemos comprado algo a tí también jejeje. Si mujer, no te preocupes, que iremos arregladitos, que en estas fechas es lo que toca, jejejeje Sí! Ya lo tengo todo preparado para el 31! Me he comprado un vestido precioso! Sí, parecido al que tú me enseñaste...

Tendríais que haber visto su cara al colgar. Todo un poema. Cambió en un segundo esa risueña expresión que tenía al hablar y quitó la sonrisa para dejar pasar a un rostro cariacontecido como el que más. Se notaba a la legua que no le hacía ni puta gracia hacer lo que acababa de prometer que iba a hacer. Casi le podías notar como le daba vueltas y más vueltas al cerebro para poder escaparse de la situación... aunque fuera el año que viene...
Y me dio por pensar (que peligro). Y llegué a la conclusión de que la comprendía. Perfectamente. No hablo sólo de tener que regalar gilipolleces por LEY y oir villancicos a todas horas, ver belenes con pastorcitos cagando, árboles con bolas colgando y lucecitas parpadeantes rollo discoteca pastillera por doquier.. En esta sociedad, tienes que reunirte y tienes que regalar gilipolleces en navidad, en cumpleaños, santos, vírgenes y mártires, aniversarios, tenemos día del padre, de la madre, del ficus, del espíritu santo amen, en bautizos, comuniones y bodas, el día de los enamorados, a los pobres que no lo están, que se jodan, en la fiesta de la comunidad es tradición regalar noseque; tienes que ir a casa de la familia (2 si tienes pareja) a hacer teatrillo al más puro estilo Jacinto Benavente, costumbrista del copón; a su vez tienes que invitar la/s familia/s a que vengan a tu establo, porque eso está muy bien visto, faltaría más. Por supuesto, los amigos también tienen ganas de ir a tu casa y tienen que ir, y tienes que preparar fuentes con gambas y panecillos con fuagrás y lomo en cantidades industriales, sin olvidar el puto turrón y los malditos mazapanes, porque llevan todo el año sin comer esperando el ágape (toma ya que palabras cultas utilizo). Como se nos iba a olvidar la familia de la familia y la familia de los amigos y la famlia de los vecinos, que también tienen que venir... Y para rematar, tienes que estar monísima con algo que te acabes de comprar y con una sonrisa al más puro estilo Soundgarden y tienes que (eufemismo de "estaría bien que") hacer regalitos a todo dios, sobre todo y ante todo a los puñeteros mocosos que se encuentran por docenas en toda familia que se precie, y tienes que cantarles villancicos con el resto de miembros familiares, y hacer la gilipollez de los reyes y papá noel y tienes que...
Y, todo, también por LEY. Por narices. Por cojones. Porque sí. Porque es lo normal. Porque se ha hecho siempre. Porque lo hace todo el mundo. Y eso ya debería ser suficiente. Y te callas. Y punto. Y ya está.

Esta locura, por qué? Pues porque a la gente, en general, le encanta comportarse como si fueran los Estados Unidos. Primero, muy diplomáticamente te dicen que tienen que venir, a ver como está todo, a ver que tal va la cosa (a cotillear, con el asco que me da, que me importa una mierda la vida/casa de los demás). Después lloriquean sobre lo mal que han sido tratados porque no había voluntad de entendimiento (no has hecho lo que nosotros queríamos del modo que nosotros queríamos) y se lo cuentan a los demás paises (cotilleo a gran escala familiar/entre amigos). Pero como ahí no puede quedar la cosa, llevan a sus tropas a la zona en conflicto (digamos Iraq) como observadores bajo amenaza de guerra del cagarse (mosqueos con todo dios y futura etiqueta de antisocial, como si eso fuera malo, para los restos, aparte de un respetable chantaje emocional). Una vez en territorio okupado y extranjero se encuentra petróleo (has dejado de sonreir 1 microsegundo, no has puesto turrón de yema y tienes un pelo suelto del coñ... perdón, del moño) y ya tenemos el follón liado. Tanto si te gusta como si no. Ni cuerpo diplomático ni oposición frontal. Okupación y guerra. Y punto otra vez.

Y yo, de verdad, pregunto: ¿te he dicho, acaso, yo a ti quiero ir a tu casa, enséñamela, que quiero cotillear y ver con quién estás saliendo, si tienes libros o revistas del corazón, si tienes mejor gusto que yo decorando, seguro que no, pienso contárselo a todo dios, además te daré 92435 ideas que nadie ha pedido, a ver como tienes la cocina y los baños, uy que monos, porque soy la hermana del primo del cuñado del portero de la tia-abuela del vecino del quinto y quiero ver tu casa?, te he dicho yo algo así?
O la famosa técnica "papa me hago pis": No he ido a tu casa - no conozco a tu novia - aún no he visto tu casa - aún no conozco a tu novia - como es posible que aún no haya visto tu casa - y llevas 1 año con tu novia y no la conozco - no he ido a tu casa - no conozco a tu novia... ad infinitum...
He dicho a alguien algo de este estilo? NO! Entonces, por qué tengo/tiene nadie que aguantar todo ésto? Ni la gente ni los eeuu tienen ni puta idea de lo que significa "no injerencia". Yo estoy muy agusto en mi prado y no voy a tocarte las narices a ver tu salón, tu marido y las fotos de la primera comunión de tus hijos, a no ser que me invites (intentes obligarme) y entonces vaya a tu casa porque, fijate tu, ese día me apetece verte. Y si no me apetece, no voy, y si montas el drama griego, me la trae al fresco. Yo no te obligo a nada, así que no me obligues tú a mí a "invitarte forzadamente con sonrisa forzada" si no me apetece en aras a una "mejor convivencia". Me has preguntado cual es mi definición de una "mejor convivencia"? Por qué la tuya es mejor que la mia? Todo ésto me suena a hipocresía barata y totalitaria. A ver por qué tengo que traer a toda la parentela a casa o ir yo a la de ellos no se que día del mes si no me apetece. Por qué tengo que regalar no se que día del mes si no me da la gana. Y encima, calladita. Pues mirad, por mí como si os salen 70 pólipos en las cuerdas vocales de cantar villancicos a los mocosos, engordáis 10 kilos de tanto comer, os visitais 30000 veces los unos a los otros como dios os ha enseñado y os dejáis arrastrar hasta la ruina por la vorágine consumista de las compras navideñas. Podéis hacer lo que os salga de los pies. Pero a mi me dejáis vivir en paz, noche de paz, noche de amor, y os aplicáis el cuento de lo que cantáis y de lo que deseáis, mucho felices fiestas (sonrisas) feliz navidad (sonrisas) pero te jodes Nipona y tragas.

Y muchos estaréis pensando, pero vacuna, eres un poco radical al comparar éstos 4 días de nada con la okupación de un pais. Y yo os contesto lo siguiente: sí, tenéis razón. "Vive y deja vivir" y "tu libertad termina donde empieza la mía" son conceptos demasiado radicales e innovadores actualmente. Y más si la religión o las "buenas maneras y buenas formas sociales" están metidas de por medio. Yo diría que son conceptos de género cierta-ficción más bien.

Pero todo este rollo que os he contado no es lo más grave. Para nada. Lo más grave es cuando un policía comienza por irse del trabajo 1 hora antes. No pasa nada, el 99% de la sociedad lo verá bien (y si puede, también lo hará). Después, comienza a perdonarse multas de tráfico a sí mismo, tampoco pasa nada, el mismo porcentaje lo aprobaría. Más tarde, le quitas multas a familiares (padres, hermanos), familiares II (tios, primos), familiares III (cuñados, novi@s de...) y no sólo no pasa nada, sino que eres aplaudido, ole! Continuas haciendo la vista gorda en coches mal aparcados, le perdonas un tráfico de pastillas en el instituto a tu sobrino, aceptas nosequé chanchullo del comisario en temas urbanísticos y acabas robando el dinero de la pensión de los policias y metido en 50 fregados. Y ojo, eso ya no te lo aprobará la sociedad (aunque muchos también harían todo ésto pero, o no tienen posibilidades de hacerlo, o tienen miedo del después...) porque estarás corrompido...
Es decir, lo realmente grave de esta historia de la chica del gorro rojo es que ya ha comenzado a no ser fiel a sí misma. A no respetar su propio ser, sus ideas, sus convicciones, sus pensamientos de toda la vida. A corromperse o dejarse corromper. Y se empieza así. Y se termina dentro de 30 años amargando a los hijos de sus hijos y respectivas parejas, evitándo que sean ellos mismos y obligándoles a buscar excusas para no tragar la misma mierda que tuvo que tragar ella. Y cuando una persona no se respeta a sí misma no puede ser respetada por los demás. Y casi, si me fuerzas, ni debe, ni se lo merece. Como dijo Benjamin Franklin: "Quienes son capaces de renunciar a la libertad esencial a cambio de una pequeña seguridad transitoria, no son merecedores ni de la libertad ni de la seguridad". Ante toda opresión, del tipo que sea, le debe seguir una rebelión, una oposición total. Si no te gusta lo que te rodea, debes cambiarlo o ayudar al cambio. Y si ésto aún no lo hemos entendido, volvamos a estudiar Historia, que falta nos hace.

Así que, sin ella saberlo, pasó de darme lástima a causarme cierto tipo de rechazo. Otra más que ha elegido el filete...



Y si todo ésto os ha parecido un coñazo, cuando menos os lo esperéis os hablaré de la psicología de masas y su deformidad y otro día de cómo surge el concepto y estructura de familia como elemento controlador y opresor del individuo (sí, habéis acertado, una idea de la iglesia) basándome en el libro El origen de la familia de Engels y, entonces, vais a saber lo que es bueno. Faltaría más.

Editado a las 10.48: quiero dejar constancia, por si no había quedado suficientemente claro que no tengo nada en contra de las fiestas navideñas específicamente. A los que os gusten: me parece muy bien, que os lo paséis genial y felicidades. Estoy totalmente en contra de, como me ha dicho un amigo, "institucionalizarnos" a los que no cuadramos con las tradiciones sociales ampliamente aceptadas. De "evangelizarnos" para que pasemos y traguemos como los demás. Estoy totalmente en contra de esa enorme falta de respeto.
Y para los que piensen que todo el post es radical: radical es una palabra que significa "4. adj. Extremoso, tajante, intransigente.". Todas aquellas personas que piensen que mi postura es radical porque es totalmente contraria a la suya, se equivocan de vocablo. Tu postura es buena y la mia radical. Eso no es correcto gramaticalmente hablando. Tu postura es una y la mia es antagónica. Es diferente de la tuya. Pensar que mi postura es radical por ser DISTINTA sí puede considerarse una idea radical. Y extremista. Y nada respetuosa.
Y yo sólo quiero que me dejen en paz con la sociabilización de las narices.
Al final, he acabado justificando mi postura y justificándome a mi misma y, en general, a los que piensan como yo. Hay que joderse.